Gustavo Alfaro, el entrenador de un Arsenal que está muy cerca de alcanzar su primer título en primera división luego de golear el pasado domingo a Boca en la Bombonera, afirmó que en el fútbol argentino "ya no se gana más con la historia, con la camiseta ni la hinchada".

"En el fútbol argentino ya no se gana más con la camiseta, con la historia ni la presión de la hinchada. Por eso sería un gran error pensar que después de ganarle a Boca lo que vendrá, en este caso Belgrano, se podrá pasar fácilmente", advirtió Alfaro en una entrevista con el programa radial Deportivo Télam.

"Los dos partidos que perdimos con Boca en la Libertadores fueron porque en el primero en Sarandí estábamos más preocupados por el descenso y en el segundo en la Bombonera nos faltó jerarquía para aprovechar el hombre de más que teníamos", reseñó.

En cambio sobre el juego de la antevíspera apuntó que se apostó "a desgastar a Boca con pelotazos frontales para los centrales y presionar en las segundas pelotas a los volantes, que por haber jugado tres días antes por la Copa iban a ser obviamente los primeros en sentir la fatiga".

"Durante la semana previa al partido Luciano Leguizamón me había dicho que contra Boca de visitantes teníamos que hacerlo igual que cuando enfrentamos a Fluminense en Brasil, donde a pesar de perder 1 a 0 hasta merecimos ganar", avisó.

"Es que al final, impulsados por la necesidad de alejarnos de la zona de descenso ahora nos encontramos peleando el campeonato. Y eso fue producto de que después que nos alejamos definitivamente de Independiente en la tabla de promedios, les dije a los muchachos que empezaran a disfrutar de este Clausura, y así llegamos a esto", remarcó.

"Lechuga" sostuvo que ante un eventual desempate con Tigre, el otro puntero a una fecha del final, si los de Victoria terminan sumergidos en zona de Promoción, "primero deben jugar por el título, que es lo más importante, y después por la permanencia".

"Y a Tigre deberían darle, después del desempate, una semana de descanso antes de la Promoción. Pero a pesar de que suene extraño, yo estoy de acuerdo con los promedios, porque son mucho más transparentes que los descensos de los últimos cuatro como ocurre en Europa, donde al final pasan muchas cosas raras", destacó.

"En lo que en cambio no estoy de acuerdo es en que si un equipo sale campeón, como ahora puede ocurrir con Tigre, por eso se salve del descenso, ya que con ese criterio tampoco podría bajar Banfield, que ganó el Apertura 2009, el primero de este bloque de seis torneos que se toman para el promedio", indicó, ofreciendo otra visión muy particular sobre el tema.

Alfaro repasó que si "no existieran los promedios Tigre ya hubiese descendido un par de temporadas atrás. Lo que tiene de negativo es que se termina pagando el precio de malas campañas anteriores".

"De cualquier manera el fútbol argentino es el mejor para trabajar, porque sobre todo los técnicos como yo que venimos del ascenso, sabemos mucho de eso de tener que optimizar los recursos para salir adelante", enfatizó.

"Pero lo que ocurre también es que acá hay mucha mentira, porque se habla más de táctica que de juego y en el medio se valora más al jugador por lo ganado que por sus dotes como futbolista", cuestionó.

En este punto Alfaro se detuvo para analizar que eso "ocurre porque hay tanto apuro en inferiores que los jugadores no llegan preparados a primera. Que no manejen los dos perfiles, tengan dificultades para controlar el balón en un tiempo y por eso dividan siempre la pelota, o se les complique dar un buen pase, es producto de ello".

"Y después, para completar el panorama, cuando aparece algún talento enseguida es transferido. Pero yo en este momento no puedo pensar mucho más allá del partido del domingo con Belgrano", argumentó.

"Mi contrato con Arsenal vence el próximo 30 de junio y la prioridad la tengo yo para decidir si sigo en el club, me voy a otra institución de Argentina o del exterior. Lo que se dijo sobre ofertas de Estudiantes de La Plata y el seleccionado de Paraguay fueron solamente versiones", aclaró.

Finalmente Alfaro le dedicó conceptos laudatorios a sus marcadores centrales. "Ojalá podamos salir campeones también por ellos, ya que con una consagración y un poco más de roce, tendrán nivel de selección".

"Lisandro López es un crack que se parece a Rolando Schiavi, porque mide 1,90 metros y corre como si tuviera 1,70, cerrando a los costados con gran sentido del tiempo y la velocidad", elogió.

"Y Guillermo Burdisso es impasable en el mano a mano, pero como Lisandro también gana de arriba en las dos áreas y convierte goles. Ahora que Alejandro Sabella está concretando un recambio generacional en el seleccionado ellos son una buena opción, porque forman una dupla consolidada. Faltaría encontrar los laterales", concluyó.