Seguramente, si el Mundial de Catar se jugase a mitad de año como es tradición, estaría muy cerca de sortearse la fase de grupos del evento deportivo más importante. Sin embargo, como consecuencia del calor el campeonato se jugará a fin de año y por ende el sorteo de la fase de grupos del Mundial recién se celebrará a fines de marzo del 2022.

De todas maneras, ya hay algunas cuestiones que empiezan a quedar claras. Con el fin de las Eliminatorias en Europa, dado que solo queda el repechaje, la distancia que han sacado sobre el resto Argentina y Brasil en Sudamérica y el hecho de que ya se jugaron la Eurocopa y la Copa América, parece muy difícil que el ranking FIFA se mueva de modo muy brusco el año que viene.

De allí saldrán los siete cabezas de serie que se sumarán al anfitrión, Catar y que evitarán a los demás equipos líderes en la primera fase, algo que siempre es positivo. Argentina ocupa actualmente el 5° lugar y parece muy improbable que caiga tres puestos como para quedar afuera de ese sitio de privilegio.

Por el momento, serían cabezas de serie Bélgica, Brasil, Francia, Inglaterra, Argentina, Italia y España. Pero hay un seleccionado de esos que todavía corre riesgo de ir al Mundial. La Azzurra, campeona de Europa, todavía debe pasar por un difícil repechaje para sacar su boleto. Si no consigue superarlo y por esa llave Portugal accede a la Copa del Mundo, los lusos serán cabezas de serie.

Si ninguno de los dos clasifica y quien va al Mundial es Turquía o Macedonia del Norte, Dinamarca pasará a ser cabeza de serie. En consecuencia, esos son los rivales que Argentina podría evitar, pero ¿de quienes debe cuidarse?

El conjunto albiceleste no debe preocuparse por ningún rival sudamericano. En ninguna zona puede haber más de dos equipos de la misma confederación excepto de la UEFA. Y es precisamente de esa confederación, de donde podrían surgir los rivales más difíciles para la fase de grupos.

Lógicamente, tanto en América del Norte, como en África y Asia hay equipos mejores y peores. No sería lo mismo medirse ante Estados Unidos que contra Panamá, por ejemplo. Pero en cualquier caso, los seleccionados de más historia están en Europa.

Dentro de los ya clasificados que podrían tocarle a Argentina están nada menos que Alemania, que no está ni entre las 10 mejores selecciones para la UEFA, pero podría ser un dolor de cabeza y Países Bajos. También podría volver a tocarle, tal como en el 2018, Croacia, subcampeón del último Mundial.

Dentro de los que todavía no se clasificaron pero podrían acceder por repechaje, aunque están un escalón más abajo, los equipos más peligrosos potencialmente son Suecia, con la posibilidad de que participe Zlatan Ibrahimovic y Polonia, con el goleador Robert Lewandoski.

Argentina ha tenido suerte dispar en los sorteos de los últimos torneos. En 2002 integró un grupo dificilísimo junto a Nigeria, Suecia e Inglaterra, el rival que todos querían evitar. En 2006, a pesar de que el equipo de José Pekerman pasó de ronda sin problemas, también tuvo en su grupo uno de los equipos que nadie quería: Holanda. 

En 2010 y 2014 el azar fue sustancialmente más benévolo con el conjunto nacional y en 2018, el sorteo determinó un grupo ni tan simple ni tan complejo, con Croacia, Islandia y Nigeria, que los errores propios transformaron en una verdadera pesadilla.