Susana Freydós fue condenada a 18 de prisión por el asesinato de su marido, el entonces gobernador de Río Negro, Carlos Soria.

La encontraron culpable de "homicidio calificado por el vínculo y agravado por el uso de arma", pero con una atenuante por las "circunstancias extraordinarias" en las que ocurrió el crimen.

Por ahora no está decidido si cumplirá con su pena en un instituto psiquiátrico o en la cárcel.

Testificaron los hijos que ella de manera permanente amenazaba con suicidarse, que padecía unos celos enfermizos, que bebía de más y que consumía tranquilizantes en exceso.

Los tres jueces entendieron que Freydós le disparó, y que su actitud no cabe en la emoción violenta.

Me puedo compadecer de esta mujer, y considerar que los jueces tuvieron razón, que hubo circunstancias atenuantes.

Pero yo creo que el caso se vuelve un caso diferente en la comparación.
La elite política no va a juicio igual que cualquier hijo de vecino...

Enseguida vamos a hablar del caso de María Ovando, una mujer que está presa por la muerte de una de sus doce hijos. La acusan de abandono de persona seguido de muerte, le caben entre 6 y 20 años de cárcel.