JERUSALEN – Europa está en guardia desde 2016. O desde antes, en realidad. Las agencias de seguridad de Estados Unidos concluyeron que ese año, el de las presidenciales, Rusia ejecutó una campaña de ciberataques que terminó beneficiando a Donald Trump. ¿Estaba al tanto Vladimir Putin? Ante la duda, Holanda, Alemania y Francia procuraron curarse en salud en las elecciones de 2017. Diversas intromisiones en sus sistemas operativos guardaban semejanza con la presunta invasión rusa en las entrañas del Comité Nacional Demócrata con la intención de perjudicar a su candidata presidencial, Hillary Clinton.