Hace ya muchos años, los jingles publicitarios llegaron a la argentina para fortalecer las campañas publicitarias de los anunciantes y generar un posicionamiento de marca relevante.

Algunos de esos jingles perduran a través de la historia y se conservan en la memoria de muchos a lo largo del tiempo.

El jingle de pilotos de Aguamar fue compuesto en 1948, apróximadamente, cuenta Rodolfo "Picho" Scaramella, hijo de quien fuera una suerte de padre del jingle publicitario argentino, que además hizo lo suyo en esta historia. "El interprete es Carlos Duarte, quien por otra parte cantaba tangos y algunos jingles para algunos colegas".