China estableció que los menores de edad podrán jugar videojuegos solo una hora por día, entre las 20 a las 21 de viernes a domingo, con un tope de tres horas semanales, más un "bonus" de una hora extra por cada feriado nacional.

A menos de 48 horas de la apertura del nuevo año escolar, la National Press and Publication Administration emitió la notificación "para la efectiva prevención de la dependencia de los menores de los juegos online", con el fin -dijeron los medios oficiales- de prevenir el antiguo problema de la ludopatía (adicción al juego).