La Armada Argentina trabaja contrarreloj para rescatar al destructor misilístico ARA Santísima Trinidad, que amaneció este lunes al borde del hundimiento luego de sufrir un desperfecto en una tubería en la base naval de Puerto Belgrano, donde está alojada desde el 2000.

El buque, que se encuentra desafectado del servicio desde el 2004 y amarrado en la principal base de la Armada cercana a la ciudad bonaerense de Bahía Blanca, sufrió un importante ingreso de agua y se encuentra marcadamente inclinado a babor, con riesgo de hundirse.

La Armada informó que esta madrugada la nave “presentaba una escora a babor debido a una avería sufrida en el casco”, como consecuencia de “la rotura de una tubería de 6 pulgadas, lo cual produjo un importante ingreso de agua”.

“Ante la cantidad de agua embarcada que superó la capacidad de las bombas de achique, se procedió a retirar al personal que se encontraba trabajando y a los buques próximos que se encontraban amadrinados junto a él, en la espera que la embarcación toque fondo con la baja y de esta manera poder trabajar con mayor seguridad”, señaló la Armada en un comunicado.

“El problema comenzó en una tubería”, enfatizó Soledad Llovet, periodista de Canal 9 de Bahía Blanca.

“Hablamos de materiales que la Argentina adquirió en 1969, que está permanentemente expuesto bajo el agua, con la erosión natural del caso”, agregó.