No es el mejor momento para Diego Schwartzman en la superficie en la que mejor le suele ir. Las últimas semanas de la gira de polvo de ladrillo, que culmina en Roland Garros, le han traído eliminaciones duras.

Primero, aquella en cuartos de final del ATP 500 de Barcelona frente a Pablo Carreño Busta, un rival duro pero contra el que llegó a estar 5-2 arriba en el set decisivo. Luego, cayó el miércoles pasado en tres sets en su debut en el Masters 1000 de Madrid contra Aslán Karatsev.