Para intentar controlar la propagación de la variante Delta del Coronavirus el gobierno debió restringir los ingresos al país, y redujo la cantidad de pasajeros que pueden ingresar diariamente al país, de los dos mil que se permitían hasta el viernes, a solamente 600 personas por día.

A razón de dicha medida, la titular de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), Paola Tamburelli, dijo que trabaja activamente en el diálogo con las compañías aéreas para coordinar los arribos. Respecto a los supuestos "varados" dijo que: “Varados había cuando no había vuelos; algunos tendrán que demorar su llegada, pero la conectividad está asegurada, aunque con un menor número de arribos”, aseguró.

Tamburelli indicó además que: “Desde el punto de vista práctico, todos los días dialogamos para que todas las empresas tengan posibilidad de operar, la conectividad está asegurada de manera diaria de todas las zonas y el diálogo con las empresas es para determinar de qué manera lograr ese objetivo. Además, resaltó que las empresas dialogan y pueden coordinar entre sí. Hoy todas las empresas están en alianzas que les permiten intercambio de pasajeros, y también hay convenios entre las alianzas. El diálogo es muy fluido y se acentuó con la pandemia, pero también hay un componente de competencia”, explicó la funcionaria en entrevista con Radio 10.

Respecto del plazo que los argentinos en el exterior deberán esperar para regresar Tamburelli dijo que: “Los argentinos en el exterior son miles. No hay forma de saber cuántos requieren un regreso inmediato, dependerá de la operación de las empresas y las conversaciones que tengan entre sí. Lo que buscamos impedir es que estas nuevas cepas entren al país y se propaguen. Eso implicará que algunos pasajeros queden demorados”, dijo.