La jueza federal María Eugenia Capuchetti sobreseyó a todos los imputados en una causa en la que se investigaban supuestas presiones de exfuncionarios y allegados al gobierno de Mauricio Macri, así como del propio expresidente, a jueces y fiscales. La decisión de la magistrada, que ya fue apelada por el fiscal Franco Picardi, benefició a varios involucrados, entre ellos Macri, su asesor Fabián 'Pepín' Rodríguez Simón, el exministro de Justicia Germán Garavano, el exsecretario de Legal y Técnica Pablo Clusellas, el exministro de Trabajo Jorge Triaca, la legisladora porteña Graciela Ocaña y el jefe de los fiscales de la Ciudad de Buenos Aires, Juan Bautista Mahiques.

La jueza argumentó en su fallo que ninguna de las presuntas víctimas, todos magistrados, denunció los hechos cuando supuestamente ocurrieron, y señaló que no se constató que alguno de los presionados hubiera tomado alguna decisión contraria a derecho. Además, destacó que los magistrados prestaron testimonio mucho tiempo después de las supuestas presiones y que no se apartaron de los expedientes que presumiblemente motivaban dichas presiones, lo que evidencia que no fueron influenciados de manera indebida o que las presiones no tuvieron un impacto significativo en sus decisiones.

El fiscal Picardi apeló la decisión de la jueza Capuchetti con el objetivo de que se revoquen los sobreseimientos y se investigue una supuesta maniobra sistemática para ejercer indebida presión sobre cualquier magistrado que tomara una decisión contraria a los intereses del entonces Gobierno de Macri.