El ferrocarril Sarmiento operó este jueves, por primera vez, bajo control total del Estado Nacional.

“Siempre hay demoras porque tendríamos que trabajar con 25 trenes y nunca ponemos más de 16 sobre las vías”, subrayó Rubén ‘Pollo’ Sobrero, secretario general de la seccional oeste de la Unión Ferroviaria de ese ramal.

“Hay responsabilidades muy serias y el Estado no controló, por lo que también fue cómplice”, señaló el dirigente gremial.

Sobrero celebró la estatización pero dijo que ahora el tren “debe pasar a manos de los trabajadores”.

“Uno de los temas que siempre reclamé son los tratamientos psicológicos”, sostuvo, al referirse a Julio Benítez, el maquinista que protagonizó el último accidente de Once.

“Puede ser que haya fallas humanas pero estas se pueden prevenir. Acá se priorizó pintar los trenes antes de poner los frenos automáticos”, remarcó Sobrero.