Marina Benítez Demtschenko sufrió un calvario. Se separó de su ex pareja en 2012, pero él mantuvo en su poder fotos íntimas de quien fuera su pareja. Decidió usarlas del peor modo. Empezó a chatear con hombres, entabló conversaciones eróticas y las reforzó con las fotos que habían conservado de Marina.