Dos delincuentes fueron detenidos luego de una violenta entradera y persecución por las calles de Rosario. El hecho se inició en Iriondo al 1800 donde, cerca de las 8 de la mañana, ingresaron a una vivienda y se robaron cerca de 50 mil dólares, entre otros elementos de valor.

Para ingresar a la casa, los ladrones maniataron y golpearon al propietario y a su hijo. Una vez que se alzaron con el botín, agarraron los teléfonos celulares de la familia y se tomaron un taxi en la puerta para escapar. Ante esta situación, los vecinos rápidamente llamaron al 911 y advirtieron a la Policía. 

Al llegar al sitio, el personal policial empezó a trabajar y lograron geolocalizar uno de los celulares robados. Según la señal del GPS, los delincuentes estaban realizaban su escape hacia la zona norte de la ciudad, por lo que en minutos se montó un operativo especial y lograron interceptar al taxi en las calles Rauch y Uriarte.

Al reconocer a los oficiales, los delincuentes bajaron del taxi y comenzaron a huir a pie. Sin embargo, uno de los delincuentes fue rápidamente detenido y el otro buscó resguardarse en una casa de la zona y luego, en circunstancias que todavía no fueron detalladas, sufrió una herida de bala que facilitó su aprehensión.