Un agente de la Brigada Motorizada de la Policía de Santa resultó herido de diez balazos con dos ametralladoras en un operativo de control de vehículos en la zona sur de Rosario. La víctima se encuentra en estado crítico, y fue operado esta mañana de urgencia por las heridas que sufrió en la zona del abdomen.

El hecho se produjo en un control vehicular en la calle Arijón al 400, en el sur de Rosario, donde Gabriel Sanabria, de 26 años, se encargaba de controlar junto a otros agentes la documentación de autos y motos en un operativo de rutina que se realizaba a la madrugada.

Al terminar el operativo, Sanabria detectó un auto sospechoso, por lo que procedió a enviar los datos a la Policía para ver si tenía pedido de secuestro. A lo cual le confirmaron que, efectivamente, el vehículo había sido robado el 24 de abril pasado. De esta manera, el policía se acercó al Peugeot 206 blanco para pedir la documentación, pero desde dentro del vehículo le comenzaron a disparar.

El suboficial, Gabriel Sanabria, fue derivado de urgencia, a las 4.30 de la mañana, al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (HECA), donde este viernes a la mañana fue operado por las lesiones.  "Las lesiones son muy graves y el estado es crítico", remarcó el subdirector del HECA Jorge Bitar. Además, explicó que, luego de la operación, Sanabria quedó internado en terapia intensiva, con respirador artificial y en coma farmacológico. 

Con el dato de que los agresores se desplazaban en un Peugeot 206 blanco, se montó un procedimiento cerrojo para dar con los gatilleros y en la calle Hungría y Batlle y Ordoñez se localizó el auto abandonado. En ese marco, se ingresó a una casa situada en una villa de emergencia, donde fueron detenidos tres hombres y una mujer con dos pistolas calibre 9 milímetros, dos ametralladoras y municiones.

Según los datos recogidos por la fuerza, serían integrantes de la banda de Los Monos.