Entró en el segundo tiempo, cuando los brasileños se venían por la izquierda de la defensa argentina, el Huevo Acuña no podía con todos y su "auxilio" Giovanni Lo Celso estaba fusilado, porque además, no siente la marca.

Y la verdeamarelha, vio cerrada la única puerta que estaba encontrando. Nicolás Tagliafico hizo su aporte los últimos minutos y de pasó, volvió a consagrarse campeón en el mítico estadio Maracaná.

Nico es el único jugador de todo el plantel que fue dos veces campeón en esa cancha brasileña. En 2017, con el Independiente de Ariel Holan, le tocó definir allí la Copa Sudamericana.

El entorno fue distinto. El plantel de Independiente sufrió un asedio en su hotel durante la noche, y un ataque constante en el micro que lo llevaba a la cancha. Arribó con los vidrios rotos e incluso, con gases lacrimógenos adentro del mismo micro. Se ve que la policía apuntó mal.

El partido terminó 1 a 1, lo que le valió a Independiente el torneo, después de haberse impuesto 2 a 1 en Avellaneda. Tagliafico levantó la Copa, primero que nadie, como capitán, frente a 80 mil brasileños absortos.

Ayer repitió, un especialista en ganar en el Maracaná.