La temporada 2020/2021 de la NBA ya tiene al primer finalista. Los Phoenix Suns, el equipo que había finalizado 2° en el Oeste, derrotó por 130 a 103 a Los Angeles Clippersy se quedó con la serie por 4 a 2. Chris Paul, el líder de la franquicia, tuvo una actuación fantástica con 41 puntos.

Hace tiempo los Suns no rondaban por esta clase de partidos. Por eso, más allá de la buena temporada regular que realizaron, pocos los daban como favoritos. Sin embargo, la experiencia de Paul y de Jae Crowder, sumada al talento de Devin Booker y DeAndre Ayton que no habían podido consolidarse hasta ahora en partidos grandes, fue más pesada que la historia reciente de la franquicia.

Paul, el base, uno de los jugadores más inteligentes del siglo, jugó un sexto partido memorable. No solo anotó 41 puntos y fue el goleador del partido, sino que también dios ocho asistencias y bajó cuatro rebotes.

Su presencia en cualquier equipo es revolucionaria, pero pocos podían esperar un impacto tan grande en una franquicia que había quedado tan lejos de llegar a los partidos decisivos en los años anteriores. El equipo de Arizona fue bastante superior a su rival angelino.

Los Clippers que se armaron desde el año pasado con grandes figuras y que pudieron juntar a dos superestrellas de la categoría de Kawhi Leonard, que se perdió toda la serie por un esguince de rodilla, y Paul George, no pudieron llegar tan alto como pretendían.

Sin embargo, hubo una evolución respecto del año anterior: en esta temporada consiguieron llegar a una final de conferencia por primera vez en sus más de 50 años de historia. Esa era una de las marcas más prolongadas de una franquicia estadounidense de cualquier deporte sin alcanzar una instancia de tales características, lo que marca que si bien las expectativas podían estar más altas por la inversión realizada, la campaña es histórica para el equipo.

Los Suns no alcanzaban la finales de la NBA desde la temporada 1993. En aquel entonces, el conjunto liderado por el gran Charles Barkley se cruzó con el mejor equipo de todos los tiempos: Los Chicago Bulls de Michael Jordan y Scottie Pippen.

Si bien los de Arizona dieron batalla, nada pudo detener a Su Majestad y compañía que se llevaron la serie por 4 a 2. Con ese triunfo consiguieron su tercer anillo de manera consecutiva. Ahora, los de Phoenix esperan por Milwaukee Bucks o Atlanta Hawks en la serie decisiva.