“La elección tiene dos etapas y el que gane el 11 de agosto va a triunfar el 27 de octubre y será el Frente Renovador”, aseveró el candidato a diputado nacional e intendente de Tigre, Sergio Massa, impulsor de ese armado político que se formó “hace 40 días, sobre la base de 20 intendentes y sobre acuerdos por los problemas de la Provincia”.

A su juicio, que sea un frente incipiente “no es un riesgo institucional” en caso de ganar los comicios y, por el contrario, sostuvo que se trata de una alianza que “pone en riesgo el poder del gobierno nacional y el provincial”.

Consultado sobre los votos que le descontó su competidor del kirchnerismo, Martín Insaurralde, en los últimos días, Massa subrayó que no tiene “miedo a perder” y retrucó: “Lo ilógico es que hoy nos sigan diciendo que lideramos las encuestas, porque irrumpimos hace sólo 40 días como una fuerza política independiente”.

En declaraciones televisivas, el precandidato a diputado por el Frente Renovador Bonaerense evitó pronunciarse sobre su sucesor en la ANSeS, el vicepresidente Amado Boudou, al advertir que "andar señalando a las personas no es la lógica que vaya a usar en la campaña".

"Mientras trabajó conmigo, hizo su trabajo. La ANSeS tenía muchos gerentes", recordó Massa al hablar en una señal televisiva al tiempo que aclaró que "no es un problema de culpable o no culpable", cuando se le preguntó si se sentía de esa manera por haber alentado el ascenso del hoy vicepresidente.

En tal sentido, reiteró que "por más que me digan tibio, soy firme en esa convicción, que es que la política tiene que vincularse con la gente y no andar hablando mal de los otros".

Asimismo, dijo que "para nada" se arrepiente de haber pertenecido al kirchnerismo, y lo graficó con una analogía: "Es como se usa un martillo en una casa, a veces para clavar un clavo, a veces para martillarte un dedo", y agregó que "uno tiene que partir del presupuesto de que la gente tiene buena fe".

Massa fue consultado también sobre su posición sobre la despenalización del aborto, tema sobre el que también evitó pronunciarse: "a mí me gustaría discutirlo con todos los sectores, y no fijar yo opinión sin consultar con el resto de la lista" del Frente Renovador.

De la misma manera respondió sobre su principal rival, Martín Insaurralde: "es el candidato del oficialismo. No voy a hablar de las personas, olvídense", invitó.

"Ni de la gestión ni de la persona, ni de él ni de nadie, porque es entrar en el cabaret de la política, y nosotros no vamos a entrar en eso", advirtió.

Eludió, además, tener que elegir cuando se le propuso hacerlo sobre el actual presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y el líder opositor, Henrique Capriles: "Eso lo tiene que contestar un venezolano. Ni Venezuela ni Brasil, Argentina", manifestó Massa.

El intendente de Tigre sí no tuvo reparos en apuntar contra el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, a quien calificó como "el principal obstáculo para la economía".

Volvió a asegurar que no armará una alianza con el macrismo porque su frente tiene "una mirada puesta en la provincia de Buenos Aires", donde el PRO no tiene candidatos.

En cuanto a aquellos que lo criticaron después de haber firmado su com promiso ante una escribanía en contra de una reforma de la Constitución sostuvo: "A veces, a las palabras se las lleva el viento. A la firma, no".