Al menos 15 personas, entre ellas 11 niños, fueron asesinadas durante un tiroteo en una escuela ubicada en la ciudad de Izhevsk, al centro de Rusia. Asimismo, 24 personas, entre estudiantes y maestros, fueron heridos. 

El atacante fue identificado como Artyom Kazantsev, de 34 años. “Llevaba un top negro con símbolos nazis y un pasamontañas. Se trata de un exalumno del centro nacido en 1988", aseguró el Ministerio del Interior a través de un informe, “estamos comprobando si era afín a las posiciones neofascistas y a la ideología nazi”. 

De igual manera, las autoridades confirmaron que el tirador se suicidó tras cometer el ataque: “Los policías encontraron el cuerpo del hombre que abrió fuego. Según nuestras informaciones, se suicidó”. Por otro lado, el Ministerio de Salud aseguró que “14 equipos de ambulancias” estaban trabajando en el lugar para ayudar a los heridos.

El suceso ocurrió pocas horas después de que un hombre abriera fuego e hiriera gravemente a un oficial de reclutamiento en un centro de alistamiento en Siberia.

El presidente ruso, Vladimir Putin, calificó lo sucedido como un "acto terrorista inhumano" y, a través del portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, agregó: "El presidente llora profundamente la muerte de personas y niños en esta escuela donde se perpetró un atentado terrorista".

No es el único tiroteo reciente que ha ocurrido en una escuela rusa. En abril de este año, un hombre armado abrió fuego contra un jardín de infantes en Ulyanovsk y dejó un salgo de tres muertos: Dos niños y un maestro.