No está de cuerpo de presente y no piensa aparecer. Algunos dicen que vislumbra un futuro como el de Coti Nosiglia y aunque la pretensión parece ambiciosa, va adoptando el estilo. Marcos Peña, dicen en el PRO, está detrás de la campaña de Diego Santilli en provincia de Buenos Aires.

Marcos se corporiza mediante uno de sus principales alfiles de toda la vida, Federico Suárez, ex ministro de María Eugenia Vidal en épocas en que Peña colonizó la comunicación de todo el gobierno y los gobiernos.

Aunque periódicamente el espíritu de quien sus seguidores llamaban EPA (El Puto Amo) se corporiza en Francisco Quintana, otro de sus aldáteres que trabaja junto a Eduardo Machiavelli a quien Horacio Rodríguez Larreta puso a cargo de la campaña de Diego Santilli.

Es posible que Peña jamás vuelva a presentarse en la escena pública como el Peña que conocimos en el gobierno de Mauricio Macri, pero aunque no lo veamos, siempre está.