Horacio Rodríguez Larreta se adueñó del PRO, y también, en algunos distritos, trata de influir en la interna de la UCR, para tener a los radicales mas cercanos, en los cargos en que cree necesitarlos.

Resuelto el problema en la CABA, con Patricia Bullrich fuera de carrera, y sin poder evitar la precandidatura de Facundo Manes en Provincia de Buenos Aires, empoderado, Larreta sale a condicionar a propios y extraños en el interior, especialmente en la estratégica provincia de Córdoba, que le dio la presidencia a Mauricio Macri.

Allí, Mario Negri, el radical mas cercano al PRO, quiere ser senador, pero Larreta pretende dejarlo en la Cámara de Diputados. Al margen de esa influencia, Negri no tiene todo claro, ni maneja todo lo que vende en la provincia.

Rodrigo De Loredo, hombre de Martín Lousteau en Córdoba, quiere dar batalla interna, buscan conformarlo con un tercer lugar en la lista de candidatos a diputado nacional. "No lo aceptamos, vamos a competir", exclamó De Loredo ante la consulta de Continental.

Larreta quiere condicionar a Negri, De Loredo le da la pelea a Negri, una cadena de hechos políticos pueden sucederse y dificilmente pueda manejarlos un porteño a control remoto.