La Policía italiana secuestró una falsificación de un coche de Fórmula 1, mas precisamente una Ferrari SF90 con el que la marca italiana compitió en el mundial de Fórmula 1 en 2019. 

La falsificación, fue hecha a escala 1:1, y se incautó en el aeropuerto de Fiumicino, Roma, proveniente de Brasil y debía ser enviada a un concesionario de la Toscana. La Policía se contactó con la escuderia Ferrari, que solicitó que retuviesen la imitación dado que porque era una copia idéntica no autorizada de su coche de Fórmula 1 de 2019.

Lo más curioso, es que se sospecha que se construyó en base a fotografías del monoplaza y con impresoras de 3D con una precisión extraordinaria.