A raíz de múltiples gritos, varios vecinos del Barrio Norte de La Plata recibieron una ingrata sorpresa: en las últimas horas, se descubrió que los gritos provenían de un prostíbulo que operaba a la vista de todos, ubicado entre las calles 12 y 43. Ante la situación los testigos dieron aviso a las autoridades, que se presentaron rápidamente en el sitio para desbaratar toda la operación.