Un tribunal colombiano ha acusado a 10 militares y un civil de desaparecer por la fuerza a 24 personas y asesinar al menos a 120 civiles y presentarlos falsamente como guerrilleros muertos en combate.

Los cargos marcaron la primera vez que el tribunal de jurisdicción especial para la paz (JEP) de Colombia ha acusado a miembros del ejército de Colombia en relación con el llamado escándalo de falsos positivos, en el que soldados asesinaron a civiles y los clasificaron como rebeldes muertos en combate para que pudieran recibir promociones u otros beneficios.