Opinión
La degradación de la política hizo sucumbir al Estado
La impericia dirigencial empujó al Estado a un proceso de disolución que empuja a ciudadanos comunes a tomar su protección en sus propias manos.
La característica principal y excluyente de un Estado es el monopolio de la administración y el uso de la violencia legítima, de ese modo, intermedia entre los conflictos de particulares, sanciona y resarce, previene y regula.
En la teoría del Estado, la sociedad cede una serie de derechos parcialmente para que el Estado los regule, pero un solo derecho lo cede completamente, el uso de la fuerza sancionatoria.
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