Este lunes por la madrugada, un ladrón robó golosinas y más de $6.000 en un kiosco y luego se lanzó a un río cercano para que la policía no lo atrape. Sin embargo, las autoridades lograron capturarlo cuando llegó a la orilla.

Según trascendió, el delincuente, de 25 años, asaltó un local de Villa María y después nadó por el afluente de agua del río Tercero, pese a las bajas temperaturas características de esta época del año. Cuando llegó del otro lado, a la localidad de Villa Nueva, fue detenido y acusado por bajo la carátula "delito de robo".