Este lunes se llevó a cabo un "piquetazo nacional" organizado por los movimientos sociales que conforman la Unión Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) y diversas organizaciones de izquierda. La protesta tuvo lugar en los puentes Saavedra y Pueyrredón, con el objetivo de reclamar la continuidad de alimentos para los comedores y merenderos comunitarios.

La manifestación se extendió por aproximadamente cuatro horas, desde las 10 de la mañana hasta a las 14 horas. En medio de la protesta, se registraron incidentes que resultaron en tres heridos y tensiones entre los manifestantes y las fuerzas de seguridad.

En el transcurso de la mañana, se generaron focos de tensión en los piquetes de los puentes Saavedra y Pueyrredón. La Policía de la Ciudad de Buenos Aires decidió avanzar sobre los manifestantes con personal de Infantería y camiones hidrantes en un intento por despejar uno de los cortes.

Los enfrentamientos se intensificaron en el Puente Pueyrredón, donde se encontraba una nutrida columna de efectivos de la Policía Federal para impedir el avance de los piqueteros hacia la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. A pesar de las situaciones de tensión, se reportaron manifestaciones pacíficas por parte de los participantes.

La jornada de protesta también incluyó bloqueos en otros accesos a la Ciudad de Buenos Aires, afectando el tránsito de automovilistas que intentaban ingresar a la Provincia de Buenos Aires o cruzar hacia la Capital Federal. Se estima que los cortes reunieron a un gran número de manifestantes en diferentes puntos de la ciudad.

Los dirigentes sociales que convocaron a la protesta expresaron su descontento ante la falta de respuesta del gobierno en relación a la emergencia alimentaria y el ajuste a la economía popular. Además, se llamó a un paro nacional y se destacó la importancia de continuar con el plan de lucha para visibilizar las necesidades de los sectores más vulnerables de la sociedad.

En medio de las demandas por alimentos para los comedores comunitarios, se destacaron los reclamos de diversas organizaciones sociales y sindicales, quienes denunciaron la estigmatización y el ajuste en programas de asistencia a los trabajadores de la economía popular. El Ministerio de Seguridad de la Nación había anunciado la aplicación del Protocolo Antipiquetes para desalojar a los manifestantes en caso de cortes de calles, avenidas o puentes.