Lo señalan como el gran "monje negro" de la política peruana. Lo llamaban el "Rasputin" de Alberto Fujimori, y responsable intelectual de muchas de las atrocidades cometidas durante el gobierno del ex presidente.

Ahora, algunos medios indican que volvió a la acción para colaborar con Keiko, la hija de aquel presidente destituído y encarcelado, y que su voz se encuentra en una cinta donde sugiere sobornar a un tribunal electoral, para que Keiko le termine ganando a Pedro Castillo.