Lejos de los globos amarillos y los temas de Tan Biónica, esta vez el triunfo de Juntos, desató un tremendo pase de facturas internas, una multitud de dirigentes queriendo adjudicarse el triunfo y la disputa por espacios que los dejen mejor posicionados para 2015.

Por ahora, las batallas son dentro de cada uno de los espacios fuertes de la agrupación. En el PRO, la presidencia del bloque y luego la del interbloque esta muy discutida. Si bien el oficialismo "larretista" busca imponer el liderazgo de Cristina Ritondo, Patricia Bullrich, gran ganadora en muchas provincias del interior, busca poner en duda al dirigente porteño e impulsar un liderazgo propio.

De hecho, muchos no descartan una alianza de Bullrich con los radicales, para entregarle el manejo del interbloque a cambio de una distribución de cargos que incluya a sus referentes.

Por el lado del radicalismo, esta claro que llegó la renovación. El diputado cercano a Martín Lousteau, Emiliano Yacobitti, salió a disputarle la presidencia a un Mario Negri vacío de poder, que perdió en Córdoba con otro aliado del economista, Rodrigo De Loredo.

Tanto Bullrich como Lousteau son potenciales presidenciables que buscan afianzar su poder para desafiar a Horacio Rodríguez Larreta, y van con todo.