Un análisis un poco más detallado y exhaustivo del resultado electoral de ayer, en cuanto a los posicionamiento políticos logrados por los dirigentes opositores dentro de su propia alianza, parece poner a la Unión Cívica Radical en un lugar de privilegio para discutir el 2023.

Si bien Horacio Rodríguez Larreta parecía el número puesto para encabezar cualquier candidatura presidencial opositora, hoy, después de los resultados de ayer, tal cuestión queda en duda. María Eugenia Vidal en CABA por ejemplo, sacó resultados muy similares a los que obtuvo su agrupación en 2019, el año en que peor le fue a Juntos, después del desmoronamiento del gobierno de Mauricio Macri. Pero en 2017, cuando la agrupación de Martín Lousteau fue por separado, sumando los resultados de ambos, rondaron el 65% de los votos.

De ese modo puede concluirse que la victoria de Larreta en CABA no fue lo esperado. Seguramente, el fenómeno Javir Milei le resto muchos votos, pero en definitiva fue una victoria "corta". 

En Provincia de Buenos Aires, el distrito siempre sustancial, se dio un fenómeno para analizar. En las PASO, cuando el radical Facundo Manes compitió con Diego Santilli, alfil del jefe de gobierno porteño en el distrito, Manes aseguró todo el interior provincial y Santilli se le impuso, porque triunfó en todo el conurbano. 

Pues bien, en la elección general, Manes retuvo el interior que consiguió en las PASO , pero perdió el conurbano que claramente era responsabilidad de Santilli, esa fue la clave de la recuperación oficialista. Entonces, da la sensación que la UCR tiene v otos fidelizados y el PRO tiene problemas serios para combatir con el peronismo.

Por fín, el interior del país refleja que el PRO no tiene anclaje en casi ninguna provincia. Carolina Losada y Mario Barletta derrotaron en las paso a Federico Angelini del PRO, y después se impusieron con holgura al PJ que gobierna el distrito. 

Carolina Losada
Carolina Losada

Gustavo Valdés obtuvo nada menos que el 60% en Corrientes y Alfredo Cornejo el 50% en Mendoza, ganando dos provincias importantes con resultados contundentes y totalmente propios, el partido gobernante en CABA carece de peso en esas provincias.

En Córdoba la PASO fue entre radicales, y el radical que perdió, Mario Negri, fue el apoyado por el PRO. Ganó el espacio de Martín Lousteau, encarnado en Rodrigo De Loredo y que sumó a Luis Juez, un dirigente históricamente maltratado por el macrismo.

Por su parte en La Pampa, donde se produjo una victoria histórica contra un peronismo siempre dominante, el candidato a senador fue el radical Daniel Kroneberger y en Jujuy, otro énclave del triunfo opositor, Gerardo Morales es el hombre clave. 

Si pasamos a un análisis numérico típico de la política, Córdoba y CABA tienen similar cantidad de electores y el triunfo radical en la provincia mediterránea, sin contar con la "caja" del estado, fue mas contundente que el del PRO en el estado Capital. La Provincia de Buenos Aires es difícil de analizar, pero el interior es bien radical, al igual que Santa Fe, otro distrito donde "la caja" la maneja el PJ pero ganó la UCR y tiene tantos electores como CABA y Córdoba.

El radicalismo va a salir a disputar lugares, y va a competir en la interna del espacio por la postulación presidencial, y con estos números, Larreta va a tener importantes dificultades para concretar su sueño.