A veces podría creerse que a Alberto Fernández no le sale una. Existen ocasiones, como cuando pregona que los brasileños vienen de la selva, que se las busca solito, pero otras como hoy, en que presenta un nuevo instrumento para lucir mas progresista y termina no resultando suficientemente progresista.

El presidente presentó hoy un nuevo DNI para personas no binarias, las que podrán requerir que se inserte una “X” en el campo referido al “sexo”.

Pero varios de los asistentes, que eran justamente personas no binarias creyeron que la medida no era acertada, y lo manifestaron bajo el slogan "No somos una X".

“El ideal va a ser cuando todos y todas seamos todes y a nadie le importe el sexo de la gente“, dijo Fernández. “Esto que algunos ven críticamente es un paso que estamos dando, que espero que termine el día en que para el DNI a nadie le pregunten si es hombre, mujer, o lo que sea. Es eso lo que realmente tenemos que conseguir. ¿Qué le importa al Estado saber la orientación sexual de sus ciudadanos?”, trató de explicar.

"Es un avance, no deberíamos renegar de esto”, se justificó luego Fernández; en medio de una atmósfera tensa que no conseguía aflojar con retórica. Valentine, la segunda persona que recibió el documento, mostró la consigna de la remera que llevaba oculta detrás de su campera: “No somos X”.