La ministra de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, Soledad Acuña, elaboró un plan de contingencia para seguir con clases presenciales, incluso si los contagios de multiplican y la situación sanitaria se agrava.

La idea, es no terminar de cerrar los colegios casi en ningún momento. En el escenario mas complejo, la mayoría de los alumnos volvería a tener clases virtuales pero no todos: mantendrían abiertas las clases presenciales en los tres niveles de la educación obligatoria, pero solo en algunos años: Sala de 5 años, Primer y Segundo Grado, Séptimo Grado y el Primer año del secundario.

El Plan de contingencia fue aprobado por el ministro de Salud, Fernán Quirós y por cierto tiene el aval de jefe de gobierno local, Horacio Rodríguez Larreta. Además de la hipótesis anterior, existen etapas intermedias, a medida que los contagios crezcan, que van desde alternar la presencialidad en los colegios secundarios, luego hacer lo mismo en las ultimas etapas de la primaria, y gradualmente llegar al escenario planteado al inicio.

Cada una de las etapas hipotéticas planteadas, reduciría la circulación de personas en la CABA en cierto porcentaje, y permitiría a la vez que los niños, niñas y adolescentes que mas lo necesiten mantengan todo el tiempo posible la presencialidad.