Las críticas del Papa Francisco por la difícil situación económica de Argentina y la acusación a la clase política como responsable de tal realidad comenzaron a tener repercusiones a nivel local. Una de las primeras en referirse a la cuestión fue la portavoz presidencial, Gabriela Cerruti, quien no realizó ningún tipo de autocrítica, sino que optó por desviar las culpas.

“Yo leía recién lo que dijo y, efectivamente, cuando dice que la política hizo que la economía estuviera como está, todos sabemos que es producto de los 4 años del macrismo que estamos todavía remontando”, afirmó la portavoz de Alberto Fernández.

Además, trató de comparar la situación de nuestro país con la de Brasil: “Cuando se fue Lula Da Silva, tenían menos pobreza. Ahora está de nuevo remontando todo. Porque en el medio, cuando pasa la derecha, sea Bolsonaro o sea Macri, sean dos o tres, cuatro años, lo que hace es tierra arrasada”.

Por otra parte, también se desligó de responsabilidades refiriéndose al contexto global en el que se desarrolló su gobierno. "Lo que nosotros sentimos es que después de haber pasado momentos muy difíciles, estamos llegando a un momento de cosechar lo que se sembró en medio de tempestades, como la pandemia, la guerra y todo lo que ya sabemos que pasó”, afirmó en diálogo con Radio Perfil.

El Sumo Pontífice realizó declaraciones en una entrevista con Associated Press y aseguró que “En este momento, Argentina tiene un nivel de inflación impresionante”. Además, afirmó que cuando él terminó la secundaria la pobreza era del 5% y hoy es del 52%, y le apuntó a los dirigentes: “¿Que pasó? Mala administración, malas políticas”.