Hoy inició la primera jornada de alegatos en el juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa y la fiscalía pidió cadena perpetua para todos los imputados por el delito de homicidio agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas. Luego de que el fiscal Juan Manuel Dávila detallara las acciones de los ocho acusados del asesinato, inmediatamente apuntó contra Juan Pedro Guarino y Tomás Colazo, dos amigos de los rugbiers que estaban en el lugar de los hechos pero quedaron fuera de la causa. Entonces anunció que acusará a ambos jóvenes por falso testimonio durante su participación como testigos en el juicio.