Un equipo de diez ingenieros, docentes e investigadores, junto con alumnos becados, ha desarrollado el primer avión eléctrico de Argentina. Este prototipo, denominado AV-100 e-Power, es una avioneta propulsada por baterías de litio de fabricación nacional y cumple con los parámetros de la categoría experimental, con un certificado de aeronavegabilidad para investigación y desarrollo. Fabricado en la planta de la empresa Aviem Aeronáutica en General Rodríguez, el AV-100 e-Power tiene una longitud de 7 metros y puede transportar hasta dos pasajeros, con una carga máxima de 180 kilos y una autonomía de vuelo de una hora.

El decano de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de La Plata, Marcos Actis, destaca las ventajas del avión, señalando que no contamina, reduce los costos de vuelo y mantenimiento, y tiene un bajo costo operativo. El diseño del avión eléctrico surge de un modelo matemático desarrollado por Actis y el ingeniero aeronáutico Ernesto Acerbo, quien fue uno de los socios fundadores del Proyecto Petrel en 2004. Para concretar el avión eléctrico, se basaron en el éxito obtenido con el micro eléctrico, utilizado para ampliar la flota de colectivos de la empresa 9 de Julio de La Plata.

Actualmente, el avión se encuentra en la etapa de montaje, ajuste y controles en el Aeroclub de Ensenada, y se espera que una vez completado este ciclo, pase por una serie de pruebas de vuelo y controles de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC). La intención es ofrecer este avión a aeroclubes y escuelas de vuelo, aprovechando la tendencia mundial hacia la movilidad eléctrica y la reducción de la huella de carbono.

El proyecto representa un avance significativo en el campo de la aviación eléctrica en Argentina y se espera que en los próximos años este tipo de aviones se vuelvan más comunes. Además, se destaca la relevancia de este logro en un contexto global de cambio climático y la importancia de promover proyectos sustentables.