El choque era complicado para ambos. Ya en 16avos de final de la Copa Argentina, San Lorenzo y Defensa y Justicia debían eliminarse. Al conjunto de Florencio Varela le bastaron unos muy buenos 20 minutos al final del primer tiempo para eliminar al inofensivo equipo de Boedo.

Con goles de Marcelo Benítez, tras desvío en Alejandro Donatti, y de Miguel Merentiel, sobre el final, se impuso 2 a 0 y se metió en los octavos de final. El Ciclón fue más durante los primeros 15 minutos.

No era brillante ni arrollador, pero generaba al hacerse ancho y desdoblarse con Juan Ramírez y Bruno Pittón por la izquierda y Ángel Romero y Marcelo Herrera del otro. Pero se apagó rápidamente y empezó a dejar jugar al rival, casi sin presionarlo hasta la mitad de la cancha.

Defensa creció de a poco, pero tuvo a Enzo Fernández muy libre y las veces que podía recuperar la pelota, le daba buen destino. A los 25, sin merecerlo demasiado se puso en ventaja. Tras un desborde y centro atrás, Jalil Elías cerró pero demoró una eternidad y Fernández le quitó fácil. Luego de un rebote por un remate de Walter Bou, la pelota derivó en Marcelo Benitez que nuevamente probó de afuera del área y tras un desvío en Alejandro Donatti que desarmó a José Devecchi, la pelota se metió.

Desde el tanto, el que se hizo ancho y se adueñó totalmente del partido fue el Halcón. La conducción de Fernández, el mano a mano de Eugenio Isnaldo y la movilidad de Francisco Pizzini le dieron al conjunto de Sebastián Beccacece una superioridad muy marcada y varias chances de aumentar la cuenta. La más clara fue una buena jugada de Bou por la derecha con posterior centro atrás y llegada clara de Fernández por el centro del área. El remate fuerte, aunque un poco al medio, lo contuvo Devecchi.

En la segunda mitad, aun un tanto incómodo, el equipo de Diego Dabove intentó repetir lo hecho en el arranque del partido, y por momentos lo logró. Le faltó creatividad en los últimos metros para intentar algo distinto a los constantes centros desde los costados. Sólo una vez, Herrera probó con un enganche y un remate en lugar de un centro e hizo lucir al arquero Ezequiel Unsain.

La confianza alta del equipo de Varela y sus consecuentes amenazas de contraataque lo mantuvieron al de Boedo sin poder volcarse al ataque despreocupadamente. Durante los últimos 10 minutos, el Ciclón, totalmente jugado, dejó espacios que el equipo de Beccacece supo aprovechar.

En el tercer minuto adicionado, Merentiel, que ingresó sobre el final, recibió un pase al vacío, y jugando con la desesperación de Diego Braghieri, lo dejó totalmente tirado en el piso y definió con toda tranquilidad contra el palo izquierdo del arquero. El vigente campeón de la Copa Sudamericana se clasificó a los octavos de final de la Copa Argentina.

Aguarda en dicha instancia por el ganador de Independiente – Tigre, partido que se jugará el 14 de abril. San Lorenzo, en cambio, sufrió un nuevo golpe en la temporada y sus principales expectativas continúan puestas en la Copa Libertadores, donde tendrá que enfrentar a Santos.