Julio De Vido enfatizó que la decisión de declarar ilegal a Fibertel “no es fundamentalista”.

El ministro de Planificación Federal aseguró que “el Estado busca proteger al usuario”.

Reiteró que “hay más de cuatrocientas compañías en condiciones de prestar el servicio”.

Y aclaró que “los noventa días para cambiar de compañía son hábiles”.

También sostuvo que el fallo de un tribunal de Mar del Plata contra la decisión del Ejecutivo “no cuestiona las resoluciones oficiales, sino que impone un plazo de diez días para que se informe cómo se implementará la medida”.