La mandataria llegó en el avión presidencial procedente de Roma cerca de las 19.00 (15.00 hora argentina) y desde el aeropuerto se dirigió al Hotel Gran Intercontinental, ubicado cerca de la Ópera de París.

Este martes, la mandataria asistirá a las 17.00 (12.00 hora argentina) a un desfile militar frente a la tumba de Napoleón Bonaparte y luego mantendrá una reunión con empresarios de Total, la empresa petrolera local con inversiones en Argentina.

La actividad central será el miércoles cuando Cristina Kirchner y Hollande almorzarán en el Palacio del Elíseo, donde "tratarán temas de la nutrida agenda que marca las relaciones entre Argentina y Francia, así como las cuestiones más importantes de la situación internacional", según la agenda adelantada por fuentes diplomáticas.

La visita de Cristina Kirchner a Francia suscitó además expectativas por la apertura formal de las negociaciones con el Club de París, el grupo de países con el que Argentina mantiene una deuda que ronda los 9.500 millones de dólares.

El Club invitó la semana pasada al gobierno argentino a negociar "un acuerdo de liquidación" de su deuda el 26 de mayo en París, según indicó la secretaria general del organismo, Clotilde Langevin, aunque se desconoce si finalmente ese tema formará parte de la reunión que tendrán ambos presidentes.

A su vez, el jueves, la jefa de Estado junto al primer ministro francés, Jean-Marc Ayrault, inaugurarán el Salón del Libro de París, la feria de lectores más importante de Francia, en la que Argentina es este año invitado de honor.

Durante la jornada, la prensa francesa se hizo eco de la controversia que se generó en Buenos Aires por la ausencia de algunos escritores argentinos con obras publicadas en el país galo que no están alineados al Gobierno y que no figuran entre el medio centenar de invitados al encuentro en París, entre ellos, Martín Caparrós y Beatriz Sarlo.