Cuando el equipo de Marcelo Gallardo no brilla, no puede. River fue más que Independiente Santa Fe y aunque no hizo un partido tremendo, mereció ganar claramente. Sin embargo, le faltó efectividad para poder imponerse en el resultado ante un rival de bajo rendimiento. Igualaron 0 a 0, pero, por el resultado del otro partido del grupo, el Millonario sigue segundo.

El partido fue de ritmo lento. El Millonario tuvo más la pelota y si bien arrancó con pases cortos para asegurar la posesión, de a poco creció y se hizo más profundo. Recién a los 25 tuvo la primera acción clara. David Martínez metió una gran pelota para Milton Casco, que centró desde la izquierda. Federico Girotti, en el área, no controló bien pero la pelota le quedó mansa a Benjamín Rollheiser, que con la cara interna de su pie izquierdo estrelló un remate en el palo.

Poco después, volvió a llegar con remate de Girotti de afuera y luego, a partir de una volea de José Paradella que fue con buena fuerza pero salió muy al medio. River fue más, aunque no brilló y no pudo romper el resultado. Al equipo colombiano le costó mucho crear fútbol.

En buena medida por sus propias limitaciones, pero también porque si bien el equipo de Gallardo no presionó tan alto, sus delanteros y volantes ofensivos estuvieron muy predispuestos a anular el primer pase.

En el arranque de la segunda mitad, otra vez el equipo argentino volvió a arrimarse. Jorge Carrascal le puso un buen pase entre líneas a Girotti y el delantero enganchó y definió. La pelota se desvió y se fue cerca del palo izquierdo del arquero.

Durante un buen rato, el juego se apagó. River dejó la claridad que tuvo en algún tramo del primer tiempo y al inicio del segundo. Falló permanentemente en el último pase, a veces por imprecisiones y en otras ocasiones por falta de creatividad.

El equipo colombiano, que en algún momento no pudo generar riesgo, hasta los últimos 10 minutos finales del partido, prácticamente desistió de intentarlo. A falta de 16, en una jugada en la que sucedió de todo, Paradella rescató la pelota, metió un centro desde la izquierda y ante un buen cabezazo de Girotti, entre el palo y Leandro Castellanos evitaron el gol. Fue la última clara que tuvo el conjunto de Núñez.

Sobre el final, a falta de 9, Santa Fe tuvo su única oportunidad del partido. Tras un córner a favor, Fabio Delgado salió rápido de contraataque, cambió el ritmo y dejó parado a su marcador, pero cuando se metió en el área demoró una eternidad y Franco Armani le achicó y lo dejó sin ángulo.

River no jugó un partido excepcional ni mucho menos. Pero, tuvo varias chances para ganarlo. Da la sensación de que el equipo de Gallardo no puede ganar si es levemente superior en el partido.

Si juega mucho mejor que el rival, lo pasa por arriba y hasta probablemente lo golee. Pero si lo supera por poco, no lo puede plasmar en el resultado. De todos modos, se mantiene en la segunda colocación en su grupo y tras el empate entre Junior y Fluminense sigue tres puntos arriba de los dos equipos colombianos.