El titular de la CGT oficialista, Antonio Caló, valoró hoy el aumento del salario mínimo, vital y móvil, que ayer se acordó que en enero suba a 6060 pesos, aunque advirtió que ya hoy se necesitan “arriba de $ 8500” para vivir “dignamente”.
“Es un piso que bienvenido sea que acá en Argentina lo podemos tener, y hace once años que lo estamos discutiendo. Hasta el 2003 estuvo clavado en $ 200, hasta que llegó Néstor Kirchner a la Presidencia”, señaló.

En diálogo con radio La Red, el sindicalista explicó que la nueva referencia salarial “solo afecta a 150 mil trabajadores de los 9 millones que hay en el país”, aunque admitió que para vivir “dignamente” se necesita “arriba de $ 8500”.

“Dignamente, arriba de $ 8500, sin tirar manteca al techo”, subrayó.

Ayer, el gobierno nacional, sindicalistas y empresarios llevaron el salario mínimo, vital y móvil de $ 4.716 a $ 5558, desde agosto, y a $ 6060, desde enero, lo que implica un incremento de punta a punta del 28,5 por ciento.

Caló adelantó también que hay “conversaciones” para reunificar la CGT a partir del 10 de diciembre, cuando asuma el nuevo Gobiern