Santiago Cafiero no tenía experiencia política relevante previa a este gobierno, aunque si prosapia. Integró el llamado Grupo Callao, una suerte de usina de "ideas" del actual presidente, antes de serlo. Desde ese lugar se hizo muy cercano a Alberto Fernández y fue designado jefe de Gabinete cuando ganó la presidencia en 2019.

Su actuación fue siempre objetada por Cristina Fernández, no alcanzó en términos generales a cubrir las expectativas- y fue señalado en esta crisis como uno de los hombres que debía alejarse del cargo.

Alberto consiguió negociar para rescatarlo del ostracismo total: perdió la Jefatura, pero fue traspasado a la Cancillería de donde desplazó a Felipe Sola, que se encontraba cumpliendo su rol en reemplazo del presidente, en México. La experiencia previa de Cafiero en política exterior, es tanta como la que tenía antes de ser jefe de Gabinete.