Daniel Emiliano Martínez llegó a Independiente a los 13 años de su Mar del Plata natal, cuando todavía no era "Dibu". Lo recibió el histórico Pepé Santoro, ídolo del club y encargado de todos los arqueros que han salido de las inferiores en los últimos años.

"Era un poco torpe pero con mucha voluntad de superación", dijo alguna vez Pepé. Fue él quien lo apodó "Dibu", el personaje central de la tira "Mi familia es un dibujo", que trataba justamente de una familia cuyo travieso hijo menor era un dibujo animado que interactuaba con los protagonistas. Era parecido a Emiliano.

Creció, mejoró, se desarrolló y en 2009 se fue al Sudamericano Sub 17, lo vió el Arsenal de Inglaterra y se lo llevó. Lo acompaño Pepé a firmar la transferencia a Inglaterra. Fue suplente, jugó algunos partidos, fue a prestamo al Sheffield de la segunda división, al Getafe de España, volvió al Arsenal y cuando tuvo una oportunidad, se consolidó en el arco.

En media temporada, el Aston Villa hizo un tentadora oferta: 21 millones de libras esterilas por su pase (unos 30 millones de dólares), y allí fue, para transformarse en esta última temporada en el mejor arquero de la mejor liga del mundo, reconocido por pa propia Premier League.

Cuando fue convocado y se rumoreó que iba a ser titular, buena parte del periodismo deportivo lo denostó, pedían por Armani o Andrada, pedían por River o Boca. Son periodistas Bover.

Ejercer la profesión mirando solamente a dos clubes es una muestra de enorme limitación. A muchos se les nota que incluso, en las transmisiones de partidos en que uno de los dos grandes de Argentina juegan con Godoy Cruz o Aldosivi, no saben ni el nombre de los jugadores. Y eso es la liga local.

Dar tu opinión a los gritos en un panel hablando de fútbol, sin mirar jamás las mejores ligas del mundo, es una limitación, una pobreza. 

Ayer Dibu descolocó al periodismo Bover, los mismos que no lo querían lo ensalzaron como un héroe. Lo fue. Pero tenia potencial para serlo. Es bueno tener en la selección a un tipo al que le patea Harry Kane, o Sterling, o Mané, o Salah y no forzar o presionar al DT para que ataje un buen arquero, pero que cada semana participa de en un futbol lento, sin preparación física adecuada, impreciso, solo porque el tipo, ataja para Bover.