
Jorge Omar Castillo, conocido como "El Rey de La Salada", fue arrestado en la madrugada de este jueves en el marco de un vasto operativo que abarcó sesenta allanamientos en la provincia de Buenos Aires. La Policía Federal (PFA) detuvo al prominente líder de la gigantesca feria de Lomas de Zamora en su residencia de Luján, bajo investigación por presuntos delitos de evasión impositiva, asociación ilícita y lavado de dinero y activos.
A solicitud del juez Luis Armella y la fiscal Cecilia Incardona, se ejecutaron pesquisas simultáneas en diversos puntos estratégicos, incluyendo ferias, oficinas, domicilios y depósitos. Como resultado, se incautó documentación contable y societaria de relevancia, junto con dispositivos electrónicos y cuantiosas sumas de dinero en efectivo y otros valores.
Esta investigación, iniciada en 2023 por la Dirección General de Articulación Operacional e Investigaciones de la Superintendencia de Agencias Federales de la PFA, logró identificar una red de casi noventa sociedades comerciales y más de 160 individuos presuntamente vinculados a maniobras ilícitas. Además de Castillo, fueron aprehendidos quienes se consideran los principales responsables de la supuesta organización delictiva.
La operación, calificada como sin precedentes, permitió avanzar sobre los implicados y los lugares asociados a una compleja estructura de evasión fiscal y blanqueo de capitales que operaba desde el polo comercial "La Salada". Parte de lo confiscado por las fuerzas policiales, a requerimiento de la Justicia, incluye soportes digitales y registros de operaciones financieras que serán cruciales para el progreso de la causa.
Entre los arrestados se encuentran los operadores centrales y encargados de la administración de las ferias bajo investigación, tales como "Megapolo La Salada" y "Urkupiña", entre otras, las cuales ya enfrentan imputaciones por asociación ilícita, lavado de activos y evasión impositiva agravada. Las acciones fueron impulsadas tras meses de vigilancia y análisis de movimientos patrimoniales, lo que posibilitó reconstruir el flujo de dinero desde los mencionados mercados hacia sociedades constituidas para simular operaciones lícitas. Se descubrió, por ejemplo, que una empresa funcionaba como una estructura contable legalizada para el presunto blanqueo de las millonarias recaudaciones en efectivo provenientes del comercio informal.