El gobierno ruso calificó de "inaceptables" los ultimátum de Kiev y sus aliados europeos, quienes presionan a Moscú para que acepte una tregua de 30 días antes de la medianoche del lunes. El portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov, declaró que "el lenguaje de los ultimátum es inaceptable para Rusia, no es apropiado. No se puede hablar así a Rusia".
El Kremlin afirmó que busca negociaciones "serias" para alcanzar un acuerdo de paz con Ucrania, aunque no respondió a la petición del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, de reunirse cara a cara con el presidente ruso, Vladimir Putin, en Estambul. El ministro ucraniano de Relaciones Exteriores, Andrii Sibiga, señaló que Rusia está ignorando "completamente" la propuesta de alto al fuego incondicional de 30 días y continúa atacando "a lo largo" de la línea de frente.
Rusia lanzó más de cien drones contra Ucrania durante la noche del domingo, en medio de los ofrecimientos de Kiev para un alto al fuego de 30 días, una condición que surgió en los intentos políticos para que Putin y Zelenski se reúnan en Turquía. Según la fuerza aérea ucraniana, los ataques con drones explosivos causaron al menos un muerto y seis heridos en el este del país, además de daños a infraestructuras ferroviarias y edificios residenciales.
Kiev y sus aliados pidieron un alto el fuego "completo e incondicional" de 30 días a partir del lunes, considerándolo una condición previa para la apertura de conversaciones de paz directas en Turquía, tal como lo planteó inicialmente Moscú. Putin declaró que cualquier conversación directa con Ucrania debería centrarse en las "raíces profundas" del conflicto, y no "excluyó" un posible alto al fuego como resultado de las conversaciones de Estambul.
El gobierno alemán advirtió que "el tiempo se acaba" para que Rusia acepte el cese el fuego antes del martes, y añadió que, de no acceder Moscú, los europeos continuarán con los "preparativos" para adoptar nuevas sanciones contra Rusia.
