
Una joven marinero de la Armada Argentina, Brisa Páez, fue hospitalizada en estado grave tras sufrir un golpe en la cabeza durante un entrenamiento antidisturbios en Vicente López el 4 de abril. La justicia ha iniciado una investigación por lesiones y detuvo a ocho superiores.
Según los reportes, Páez se desplomó tras ser golpeada en el escudo por un instructor, y no recibió asistencia inmediata. A pesar de sentir un fuerte dolor de cabeza, continuó el entrenamiento y fue derivada a la enfermería, donde su condición empeoró, presentando parálisis y sufriendo una convulsión.
La gravedad de las lesiones llevó a su traslado a la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital Militar Central, donde fue inducida a coma farmacológico. La jueza federal Sandra Arroyo Salgado ordenó la detención de ocho superiores, incluyendo instructores y el suboficial a cargo, por presuntas lesiones gravísimas, incumplimiento de deberes y posible encubrimiento.
Se realizaron allanamientos en la base naval y domicilios de los implicados, donde se incautaron evidencia como teléfonos, documentos y registros audiovisuales. La jueza tiene diez días para definir la situación procesal de los acusados.
Afortunadamente, la marinero ha mostrado mejoría, saliendo del coma y recuperando la capacidad de hablar y entender. Paralelamente a la investigación judicial, la Armada ha iniciado una investigación interna para determinar las sanciones correspondientes a los responsables.