Alertan por el alto número de niños que perecen en accidentes viales y domésticos, por causas evitables.

El Dr. Luis Agote, médico pediatra y Seccretario del Comité de Prevención de Accidentes de la Sociedad Argentina de Pediatría, remarcó que al menos dos menores pierden la vida diariamente y otros tres quedan discapacitados por los golpes que reciben.

“Hay dos cosas para evitar los accidentes: mirar el medio ambiente con ojos de niño y usar criterios de anticipación. Para lo primero, imaginemos el mango de la sartén saliendo de la cocina. En cuanto a lo segundo, el adulto debe quitar del cuarto todo lo que sea perjudicial para los niños”, precisó el especialista.

“Los médicos sabemos por estudiar las características de estos eventos, son perfectamente controlables”, remarcó Agote y recomendó hacer hincapié en aquellos objetos que sean más pequeños que el tamaño de la boca de un bebé que aún gatea, como alfileres de gancho o lentejuelas.

“Una cosa peligrosa son las pilas electrónicas que tiene carga positiva y producen úlcera en el estómago”, dijo el especialista y pidió tener especial atención en este tipo de objetos.

Agote advirtió que la prevención para este tipo de casos “es muy escasa”.

En otro orden, pidió modificar las leyes por lo que consideró “la mayor preocupación actual”: los niños que mueren en accidentes viales.

“Desde que es concebido el niño debe ir en el asiento de atrás”, dijo. Además, se quejó porque “no se le da a la madre las indicaciones correspondientes”.

"Las sillas (para niños en el vehículo) salvan la vida en un 72 por ciento y esto es verdad, no es el INDEC”, resaltó Agote.