El Manual Práctico de Construcción para Obras y nuevos Arreglos de Jaime Nisnovich es un libro muy didáctico, con muchos gráficos, de lectura muy sencilla.

“Cuando estaba en segundo año de la facultad, escribí un artículo que titulé ‘Superemos la punta de nuestras narices’, que era salir de la General Paz e ir a los clubes de barrio y capillas para hacer cursos”, comenzó su relato el autor, de visita en los estudios de La Vuelta.

“Después fui arquitecto e hice muchos barrios. El más grande que participé fue en el norte del país; eran conjuntos habitacionales. Pero empecé a entrar en crisis con la arquitectura y su moda: siempre lo último que estaba era la verdad”, agregó el profesional.

“Un día, en el ’83 me desperté a mitad de la noche y redacté la idea de hace un manual para tirada en fascículos en algún diario. Trabajé en el proyecto durante una semana y averigüé cómo conseguir fondos”, explicó.

Nisnovich remarcó que “en el Gran Buenos Aires es todo autoconstrucción. De las casas apoyadas sobre el terreno, el 60 por ciento de las viviendas están autoconstruidas. Es brutal: todo el que necesita vivir y no tiene el dinero se hace la casa”.

“Muchos contratan albañiles con los que trabajan en conjuntos pero, muchas veces, el mismo dueño termina la vivienda solo”, sostuvo el arquitecto.

Los manuales son tres, se consiguen en los quioscos y también en muchas librerías.

“Todo esto nos dio una gran sorpresa: al día de hoy, este es un libro de información en la universidad de arquitectura. También lo distribuye el gobierno en los cursos a cooperativas para que la gente aprenda oficios. Esto nos hace sentir que lo que hicimos tiene un uso, sirve”, enfatizó.

“La gente se pone a hacer cosas, es impresionante lo que hace”, sostuvo.

Nisnovich recordó un llamado de consulta que le hicieron desde la Base Marambio. En ese sentido, resaltó, el manual que editó responde a los materiales y al clima de Argentina. “En Brasil es distinto lo que usan; esa es la profundidad de la obra y también su limitación”, señaló.
“La clave es: ‘si yo lo hago, la mano de obra me sale gratis’”, subrayó el profesional.

Construcciones en Villas. “Lo que busca la gente es que esa zona se sume al resto de la ciudad. Se trabaja con cosas más rudimentarias, es un tema meramente económico”, dijo.

“Mucha gente me dice ‘no sabe lo linda que me quedó’ la casa. Esas cosas me encienden”, resaltó y sostuvo que ‘lo lindo’ o ‘lo feo’ es una cuestión de cada uno.