Poco después de las 8.40 terminó el velatorio de Doña Tota, madre de Diego Armando Maradona, y tanto familiares como amigos cercanos a la familia emprendieron viaje rumbo a un cementerio privado de la localidad de Bella Vista, donde se le dará cristiana sepultura.

El propio Diego fue uno de los primeros en salir de la casa velatoria, seguido por sus hijas, Dalma y Gianinna, y su ex mujer, Claudia Villafañe, entre otros.

La muerte de Dalma Salvadora Franco de Maradona aún conmueve y causa congoja en los ámbitos. Durante la noche, distintas personalidades se acercaron a la casa velatoria de Tres Arroyos al 1500, en la Paternal, entre los que se destacó Martín Palermo.


El dolor de Diego Maradona fue el dolor de todos en el ambiente futbolero, en nuestro país y en el resto del mundo, que acompañó con enorme respeto el fallecimiento, a los 82 años, de Dalma Salvadora Franco, la madre del mejor jugador argentino de la historia.

Maradona llegó anoche a nuestro país, procedente de Emiratos Árabes Unidos, luego de dirigir un partido de Al Wasl, el club que lo contrató hace unos meses como entrenador. El ex capitán de la selección nacional arribó en un vuelo de Qatar Airways, y luego del extenso viaje eludió a la prensa y dejó el aeropuerto de Ezeiza por una salida lateral para dirigirse a su casa, situada en la misma localidad, en la que se reunió con su círculo familiar para definir la despedida a su madre. Al rato, concurrió al velatorio.

Según se supo, Diego ya estaba al tanto de la gravedad del estado de salud de su madre; desafortunadamente, no llegó a tiempo para verla con vida. Antes de subirse al avión que lo traería de regreso a Buenos Aires, se enteró del deceso a través de su médico personal, Alfredo Cahe. "Le pedí que viniera cuando vi que el cuadro no era bueno, y después le informé sobre el fallecimiento", dijo Cahe a radio Mitre.