El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió el alerta Naranja para la Salud en las Ciudad de Buenos Aires y sus alrededores, por la ola de calor que persiste en toda la zona. Rige, en principio, hasta la tarde de este lunes. El alerta Naranja para la Salud implica que “las olas de calor pueden ser peligrosas, especialmente para los bebes y niños pequeños, personas mayores de 65 años o aquellos con enfermedades crónicas. Es necesario cumplir las normas dadas por el Ministerio de Salud de la Nación frente a la ola de calor”.

Por Continental, Luis Crovetto, director de Medicina Preventiva de la Provincia de Buenos Aires, explicó que el golpe de calor es considerado el cuadro más severo “derivado de la prolongada exposición a las altas temperaturas y, en estos casos, los afectados suelen presentar la piel caliente y roja, el pulso acelerado, mayor transpiración, dificultad para respirar, dolor de cabeza, náuseas, somnolencia y sed intensa. Dada su menor capacidad para regular la temperatura corporal, tanto los niños menores de 5 años como los ancianos son los más propensos a sufrirlo”.

“La pérdida de líquido que se produce a través de la transpiración y la orina se acentúa cuando hace calor y, tanto los chicos como los ancianos, no lo compensan con una mayor ingesta de bebidas porque suelen no percibir la sed”, advirtió en Magdalena Tempranísimo. Por lo tanto, “hay que ofrecerles bebidas permanentemente para no caer en un desequilibrio que puede resultar peligroso”, agregó.

Entre los principales síntomas de un golpe de calor, mencionó “los calambres musculares en brazos, piernas y abdomen, además de agotamiento, aturdimiento e insomnio. Ante estos síntomas, resulta necesario suspender las actividades que se estén realizando, sobre todo, si implican esfuerzo físico. Además, hay que refrescarse, usar ropa clara y descansar en un lugar fresco. También se debe beber abundante agua, jugos de frutas frescas o bebidas mineralizadas, y hacer que los niños hagan juegos tranquilos en los horarios de mayor calor”.

Finalmente, “las personas que realizan ejercicios físicos al aire libre deben tomar recaudos, como por ejemplo beber agua antes, durante y después de la actividad física”, completó Crovetto.