Micaela Blasco, la joven de 20 años hallada asesinada ayer en su departamento del microcentro de Mendoza, murió por asfixia por inmersión en la bañadera, donde fue introducida en estado de inconsciencia tras haber sido estrangulada con un cable, según los resultados de la autopsia.

Los forenses determinaron que el asesino, que se presume pertenece al entorno de la víctima, primero estranguló a la chica con un cable y, cuando quedó en estado de inconsciencia e indefensión, la metió en la bañadera, donde murió ahogada.