Pablo García, el joven imputado por el delito de homicidio culposo tras atropellar y matar a un ciclista en la autopista Panamericana, aseguró este jueves por la noche a los medios que cuando salió del auto aquel día "no estaba en estado de ebriedad" a pesar de que el análisis de alcoholemia arrojó que poseía 1,45 gramos alcohol en sangre. Además, sostuvo que la Policía no le permitía descender del vehículo y reiteró que "recuerda muy poco" de lo que pasó después del choque.

"La Policía no me dejaba bajar", aseguró el hijo del periodista Eduardo Aliverti, quien enfatizó: "Cuando salí del auto no estaba en estado de ebriedad". Horas después de su declaración indagatoria, confesó: "A partir del momento del choque recuerdo muy poco".

"Hubo hostigamiento de los medios. Hay cierto periodismo que está ensañado con mi padre. Yo en ningún momento de mi carrera utilicé el apellido Aliverti. Siempre fui Pablo García. Porque desde que me recibí decidí que no quería ser 'el hijo de'", manifestó el joven.

"Utilizaron método de escrache, que no se ajusta a derecho. Yo siempre estuve ajustado a derecho, siempre me presenté ante la Justicia", dijo señalando las pintadas que dicen "asesino" en la puerta de su casa. Asimismo, señaló: "No voy a contar lo que hablé con la familia porque si lo cuento, perjudica al hermano de Reinaldo Rodas".


Por Continental, Adrián Sabaris, abogado de la familia de la víctima, Reynaldo Rodas, consignó que la defensa del locutor pidió “el sobreseimiento” de su defendido. En Magdalena Tempranísimo, aseveró que la fiscalía “elevará la causa con dos carátulas: homicidio culposo, y homicidio simple con dolo eventual”.